Con motivo de la Exposición Iberoamericana de Sevilla (1929), se decidió construir lo que se conocería como el Pabellón de Sevilla y que estaba compuesto de dos elementos que a la vez se articulaban entre sí: El Casino y el Teatro de la Exposición.
Con motivo de la Exposición Iberoamericana de Sevilla (1929), se decidió construir lo que se conocería como el Pabellón de Sevilla y que estaba compuesto de dos elementos que a la vez se articulaban entre sí: El Casino y el Teatro de la Exposición. El proyecto fue encargado al joven arquitecto Vicente Traver y Tomás que, en Septiembre de 1926, sustituyendo a Aníbal González, que presentó su dimisión, fue nombrado Arquitecto General de la Exposición Iberoamericana de Sevilla.
El 11 de abril de 1936 se convirtió en el Teatro Municipal Lope de Vega. Tras su cesión por parte del Ayuntamiento al Ministerio de Cultura en la década de los setenta, en 1985 el Ayuntamiento de Sevilla lo recupera para acometer una profunda reforma reinaugurando el espacio, tal y como lo conocemos hoy, el 21 de febrero de 1988.
Asier Etxeandia aprendió a hablar cantando, repitiendo canciones que sonaban en la radio de su infancia. “Cuando era pequeño me ponía de espaldas contra la pared en un rincón de mi cuarto. Escuchaba mi voz con el eco de la pared, un eco que la hacía parecer un micrófono y me sentía un cantante de verdad”. En esta necesidad de cantar se encuentra con el compositor Tao Guitiérrez y de esta unión nace “El Intérprete”. Se trata de una obra que intenta alejarnos de lo convencional mezclando géneros como el concierto y el biopic teatral. Un viaje emocional por temas que forman parte de nuestras vidas. Kurt Weill, Héctor Lavoe, Lucho Gatica, Chavela Vargas, La Lupe, Gardel, Talking Heads, David Bowie o Rolling Stones se mezclan con creaciones originales del propio Asier Etxeandia.
Teniendo en cuenta los tiempos que corren, me he venido rodeando de algunas ideas que me son muy útiles: “al final todo sale bien… y si no sale bien es que todavía no es el final”, “si tienes limones, haz limonada”, “se quejaba de que no tenía zapatos hasta que vio a otro que no tenía pies”, “tener rencor es como beber veneno y esperar a que muera el otro”. Me las repito cada mañana y sigo en la resistencia. Uno más entre una multitud. Hace unos meses el feSt me pidió que dirigiera una gala de inauguración, una fiesta, un “cabaret”. Entonces me dije: “Uf, al final todo saldrá bien… ”. Reunir sobre el escenario a un grupo de artistas de disciplinas tan distintas, para hacer un show único que nunca se volverá a repetir y encontrar “la chispa” para que llegue al público una corriente de aire puro, es siempre todo un reto. Pero contamos con una ventaja: los artistas hacemos familia hasta en el infierno. Inaugurar un Festival emergente y cada día más activo como feSt es todo un honor y un placer. Tenemos grandes artistas sobre el escenario: Circo, Variedades, Cabaret, Música, Danza… Si algo falla, la culpa es del que suscribe.
Emilio Goyanes, Director de la Gala
El amor siempre nos da una oportunidad